La Cruz Orlada le fue transmitida una noche a Benjamín Solari
Parravicini, su forma es similar a la Cruz Griega, es decir, tiene los dos
brazos o leños iguales.
Podemos encontrar esta cruz en casi todas las culturas precristianas,
como representación o un signo sagrado; podemos distinguirla entre los
egipcios, hititas, sumerios, asirios, caldeos, hindúes, persas, chinos,
semitas, aztecas, mayas e incas. En Europa era venerada entre los celtas,
vascos, griegos y germanos. Posteriormente, en la época bizantina apareció en
el interior y exterior de todas las iglesias y templos cristianos. La
aplicación más conocida de la Cruz Griega en la actualidad está en el símbolo
de la Cruz Roja y en la cruz de Cáritas.
Gracias a las informaciones que llegan a nuestros días como legado de
Solari Parravicini, podemos comprender que esta particular cruz, debe su nombre
al círculo de orlas que la rodea, este círculo representa al Universo, que es
circular, infinito, el Todo representado como Dios Universal, orlas en círculo
que dan la impresión de un sol, representando Amor, Fe, Luz. El detalle de sus
brazos iguales, nos habla de un equilibrio e igualdad... todos somos Uno,
unidos, -tal como lo representa el corazón en medio del cruce de sus leños- en
este Amor y Luz Universal.
La Cruz Orlada tiene la particularidad de revertir la polaridad negativa
de un lugar, en positiva, no importando en que material esté elaborada. Existen
pruebas radiestésicas, realizadas por el sacerdote e investigador, padre
Ricardo Gérula, cuyos resultados confirman las propiedades transmutadoras de la
Cruz Orlada. En su libro "Territorio interior", el autor se refiere a
la cruz griega de la siguiente manera: " ...son muchos los símbolos que
pueden influir y desequilibrar la energía personal, citamos uno solo: La Cruz.
Con todo, hay una aclaración que realizar. La Cruz griega (con los dos brazos
iguales) no desequilibra."
Posteriormente, al ser consultado el padre Gérula, respecto a la
similitud entre la cruz griega y la Cruz Orlada, éste accedió a hacer pruebas
aplicando sus conocimientos en radiestesia, fue entonces que el padre Gerula
tomó la medalla de la Cruz Orlada en sus manos y al acercarle su péndulo, éste
giró fuertemente, determinando un campo de energía positiva. El padre quedó
sorprendido y propuso hacer una prueba con aquella medalla, colocó la misma
sobre un campo de energía negativo, ubicado en el piso de una de las
habitaciones de la parroquia, para posteriormente aplicar sobre el lugar su
péndulo; gracias a esta indiscutible prueba, constató que la medalla había
convertido la polaridad negativa en positiva, demostrando así la capacidad que
posee la Cruz Orlada de revertir energía negativa en positiva.
Debido a todos estos antecedentes, y a la información presente en las
psicografías que recibiese Solari Parravicini y que nos explicitan claramente
el significado y el porqué de la necesidad de utilización y divulgación de este
símbolo, es que hoy en día es muy utilizado como una poderosa herramienta de
transmutación y protección.
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