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jueves, 24 de julio de 2014

TECNICA PARA APLICAR LA ACUPRESION EN LAS MANOS

Como con los pies y las orejas, hay un “mapa” del cuerpo humano en tus manos. Cada parte del cuerpo, incluyendo tus órganos, está emparejado por un punto de reflexología correspondiente en tus manos.

Aplicar presión a los puntos de reflexología estimula los pulsos nerviosos que viajan a través del área del cuerpo correspondiente. Estos impulsos producen una respuesta de relajación. Mientras que el músculo se relaja, los vasos sanguíneos se abren, incrementando la circulación, que incrementa la cantidad de oxígeno y nutrientes que entran en las células en esa parte del cuerpo.

Pasos:

1 Hazte reflexología en tus propias manos para aliviar los síntomas de dolores de cabeza, congestión y dolor de hombros. La reflexología de manos requiere que apliques más presión que lo que usarías en tus pies porque los puntos de reflexión en tus manos son mucho más profundos.

2 Siéntate en una silla cómoda en una habitación tranquila y sombreada.

3 Entra en un estado de relajación aplicando un poco de tu aceite para manos favorito. Los aceites y cremas normalmente no se usan en las sesiones de reflexología profesionales, pero no te hará ningún daño usarlas en una sesión informal.

4 Frota la crema en tus manos por varios minutos hasta que se absorba completamente. Esto va a relajar tus manos e incrementar la flexibilidad en preparación para aplicar reflexología. Asegúrate de no usar una crema grasosa o aceite para que tus manos no estén resbalosas.

5 Cierra tus ojos y concéntrate en cualquier área de tu cuerpo en la que sientas algún dolor incómodo. Algunas veces simplemente vas a sentir como si alguna parte de tu cuerpo se sintiera desalineada.

6 Consulta una tabla de reflexología de manos para identificar los puntos de reflexión en tus manos que correspondan a las partes de tu cuerpo que quieres trabajar. Por ejemplo, Si tienes dolor en tu hombro izquierdo, tienes que consultar la tabla y ver que los puntos de reflexión para tu hombro están localizados en el dedo meñique de la mano izquierda.

7 Presiona firmemente el punto de reflexión. Puedes incrementar la presión gradualmente para asegurarte de que estás “activando” el reflejo, pero afloja un poco si sientes algo de dolor.

8 Mantén la presión por 30 segundos y suelta.

9 Espera unos cuantos segundos y repite el procedimiento. Puedes presionar ya sea por 30 segundos o puedes presionar y soltar el punto de forma pulsante por 30 segundos.

10 Usa un dedo o tu pulgar para aplicar una presión ligeramente si la técnica de presión te es incómoda. Para hacer esto, usa un movimiento circular sobre el mismo punto de reflexión por cerca de 5 segundos, entonces rota de forma circular en la dirección opuesta durante 5 segundos. Repite varias veces para cada punto de presión.

11 Aplica reflexología a todas las áreas en ambas manos, pero préstale más atención en las áreas problema.

12 Cuando hayas terminado tu sesión de reflexología siéntate en silencio por lo menos durante 10 minutos. Si es posible, recuéstate y descansa bien durante media hora.

13 Bebe varios vasos de agua después de aplicar reflexología. El agua va a ayudarte a drenar las toxinas que se liberaron de tus órganos y músculos durante la sesión.

Consejos:

La reflexología en las manos te va a dar los mismos resultados que hacerlo en cualquier otra parte del cuerpo, pero va a tardar un poco más para que pase.

Cuando le estés dando una sesión de reflexología a un amigo, Haz que se sienten del otro lado de la mesa y coloca una toalla debajo de sus manos y muñecas para que sus manos estén relajadas.
Siempre trabaja los puntos de reflexología en ambas manos para que tu cuerpo no se salga de balance.

Si tienes artritis y te duele cuando usas tus pulgares o dedos, puedes usar otros objetos para que te ayuden a aplicar presión en los puntos de reflexión. Aunque puedes comprar instrumentos de reflexología, son caros. Puedes obtener los mismos resultados usando objetos comunes del hogar para aplicar presión a tus puntos de reflejo. Presiona o rueda una bola de golf o cualquier otro objeto pequeño redondo en tu mano, como un rizo para el cabello. Si te duele mucho cuando lo presionas, coloca el objeto en una superficie plana y ruédalo debajo de tu mano, presionándola tanto como puedas en el objeto.

Mientras que una habitación oscura y tranquila es ideal para una sesión, también puedes hacer reflexología de manos mientras que estás en tu escritorio en el trabajo.

La teoría de la reflexología de manos es que cuando algo no está funcionando bien en el cuerpo, el punto de reflexión de la mano correspondiente se va a sentir diferente cuando se le aplica presión. Tal vez se sienta más dura, suave, más tensa o incluso crujiente de lo normal cuando le aplicas presión. Si te topas con un punto irritado, puedes revisar tu tabla de reflexología de manos para ver a qué área del cuerpo le corresponde.

En la sección ACUPRESIÓN de mi Biblioteca encontraréis muchísima información al respecto. 


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