Canalización del Ser Superior, a través de Noor Canal Espiritual al
servicio de la Luz. 13junio2014.
Este es el ENLACE al video en mi canal YouTube.
Sed bienvenidos, queridos.
Muchos de vosotros os dais cuenta, cada día más, de que esta sociedad en
la que vivís no se sostiene de la misma forma ni por más tiempo.
Poco a poco habéis crecido como humanos; poco a poco, muchos de vosotros
estáis despertando, y es por esta razón que me dirijo a vosotros, los
despiertos. Para que cada uno, se encuentre en el lugar donde se encuentre,
fomente la reproducción del amor y la lealtad hacia vuestra madre la Tierra.
Esta madre viva, viva y amorosa como pocas, que desde hace milenios os
acoge sin quejarse. Apenas le queda un soplo, un soplo de vida, debido a las
muchas barbaridades que se han hecho en su contra.
Con esto no quiero decir, de ninguna manera, que os haga a vosotros
culpables de ello. La inconsciencia humana colectiva se ha ocupado de trazar un
camino muy poco adecuado, para que la especie humana pueda crecer en el amor de
la Consciencia Universal.
De esto no se habla en las aulas, de esto no se habla en los noticieros,
de esto nadie se da cuenta en los periódicos, por ello, somos muchos los que
desde este lado creemos firmemente que enviar mensajes de este estilo puede
abriros aún más vuestros ojos y a la vez tocar vuestras consciencias, para que
seáis realmente claros con vosotros mismos, porque solo así podréis y sabréis
ser claros con aquellos que se encuentran a vuestro alrededor.
Solo así la palabra será propagada y solo así vuestra sociedad alcanzará
el primer peldaño de la capacidad de sanarse a ella misma. Sanándoos a vosotros
mismos podéis ser capaces de sanar a la sociedad, y si un % amplio de esta
sociedad lo consigue, Gaia, nuestra madre Tierra será capaz de sobrevivir.
Ella se lamenta, queridos, se lamenta y llora a menudo por las barbaries
que se hacen sobre su superficie. Por las barbaridades que incluso sobre
vosotros mismos ejecutáis. A nadie escapa que millones de personas en el mundo
pasan hambre; a nadie escapa que millones de personas pasan frío, necesidad y
calamidades; a nadie escapa, pero nadie mira de frente a sus ojos porque duele
demasiado. Es mejor ignorar o eso pensáis; es mejor dar la espalda o eso
pensáis; es mejor gratificar por navidad y así, cuando os sentáis a vuestras
mesas repletas de alimentos, podéis compensar, en cierto modo, el desaliento
que en vuestros corazones se halla.
Solo siendo capaces de sentir el dolor de los demás en vuestra propia
consciencia, al mirarles de frente a los ojos, solo así, queridos, seréis
capaces de sanar, de sanar y de ayudar.
Las aportaciones económicas son un grano de arena en un desierto. Cada
aportación económica supone algún alimento para alguien necesitado, pero tan
solo es eso, un simple grano de arena. Ya sabemos que muchos granos de arena
forman un gran desierto, pero esa no es la solución. La solución no es un grano
de arena porque se trata de algo material. La solución es que vuestros
corazones, vuestras consciencias, se den cuenta de que esta realidad en la que
vivís, en la que vuestra sociedad está anclada desde hace muchísimo tiempo, no
se sostiene ya.
Es imposible que la raza humana sea capaz de encontrar el camino para
continuar en la forma en que se está llevando hoy. Es imposible porque esta
sociedad se cae. El sistema económico es decadente. El sistema de castas, sí,
de castas, separa a unos de otros. A pobres de ricos, a blancos de negros, a
inteligentes de no tan inteligentes, a agraciados de no tan agraciados. Os
horrorizáis cuando veis que en países subdesarrollados todavía existen las
segmentaciones por castas. En cambio no os dais cuenta, muchas veces, que en
vuestra sociedad, esta sociedad occidental con cabeza coronada de oro y pies de
fango se tambalea, y se tambalea en este momento como nunca jamás se ha llegado
a tambalear.
Sí, queridos, en esta sociedad que tanto os agrada, en esta sociedad que
ríe las gracias a los que no son graciosos; en esta sociedad vuestra llena de
irascibilidad, llena de engaño, llena de oscuridad, es difícil ver el camino con
claridad.
Solo cuando vosotros los despiertos, vosotros almas viejas, solo cuando
vosotros seáis capaces de daros cuenta que la segmentación humana no os ayuda a
elevaros de ninguna de las maneras, solo entonces podréis cambiar, solo
entonces seréis capaces de ver que existe otro camino. Un camino lleno de luz,
un camino amoroso, un camino lleno de ternura hacia los demás. No hacia los que
tenéis lejos, eso es demasiado fácil, eso ya lo hacéis en Navidad, sino los que
tenéis cerca, con los que convivís puerta con puerta. Tendedles la mano,
ofrecedles vuestro corazón, si es necesario un plato de comida también, pero
sobretodo mostradles que existe un camino lleno de Luz, lleno de amor y lleno
de compasión. Un camino en el que vosotros, sin ellos, no permaneceréis. Un
camino que muchos de vosotros, sin ellos, jamás comenzareis. La raza humana,
sin divisiones, sin castas, sin superiores ni inferiores, debe avanzar al
unísono. Debe avanzar con pasos de gigante, fuertes pero iguales, con pasos que
pueden avanzar en este camino de aprendizaje y conocimiento de la Consciencia
Divina.
A muchos de vosotros este mensaje llegará, llegará hasta lo más profundo
de vuestro ser. Otros quizás ni siquiera lo comprendan. Es a estos a quienes
vosotros, despiertos, debéis dirigiros, independientemente de donde estén, de
quienes sean, y por supuesto, independientemente de aquello que tengan o no
tengan.
Queridos, los tiempos están cambiando, los tiempos cambian muy deprisa y
vuestra sociedad, esta gran sociedad occidental esta putrefacta, esta
corrompida desde el centro. Pocos son los que mantienen su consciencia limpia,
pocos son los despiertos que mantienen su integridad.
Alzaos!, alzaos despiertos y no tengáis miedo, ya que el temor es a
menudo el que frena las acciones. Alzaos y no tengáis miedo de gritar. Alzaos y
no tengáis miedo de ayudar. Alzaos y no tengáis miedo de caminar. Cogeos de la
mano de éstos que no os comprenden porque si no lo hacéis, de nada servirán
estos granos de arena que sobretodo en épocas navideñas os afanáis en
dar.
Almas viejas, no busquéis tanto ni tan lejos porque aquello que buscáis
vive a vuestro lado. Abrid vuestros corazones y vuestras mentes mucho más de lo
que tenéis abierto ahora. Vivid en el amor y la Luz llegará hasta
vosotros.
Que así sea.
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