Extractos
de conferencias del Dr. Sri K. Parvathi Kumar y de Los Libros de Alice A.
Bailey y el maestro Tibetano Djwhal Khul.
Introducción
Según
la Jerarquía si hay un trabajo noble que hacer o un noble servicio que rendir
es el de darle a la gente una comprensión apropiada de lo que nosotros solemos
llamar la muerte.
Krishna
le dijo a su discípulo Arjuna “No te preocupes nadie muere, es solo una
cuestión de volver a cambiar de forma. Todos aquellos que están existiendo
ahora, existieron en el pasado y seguirán existiendo en el futuro.
La clave astrológica
Escorpio,
signo de la muerte.
Escorpio
es el octavo signo del zodíaco, que corresponde a la octava casa, la casa de la
muerte o la regeneración, rige también las cuevas subterráneas, la grutas
profundas.
En
Escorpio se produce la muerte de la personalidad con sus anhelos, deseos,
ambiciones y orgullo. También se le llama a Escorpio el signo de la muerte
porque el buscador de la verdad en este signo asesta un golpe mortal a todos
los obstáculos que lo han mantenido atado durante miles de vidas.
En el
sendero de regreso hacia el mundo del Espíritu el buscador de la verdad se
encuentra con su personalidad, simbolizada por la Hidra de nueve cabezas en el
mito de Hércules, y debe trabajar con ella, místicamente, debe “matar” a la
Hidra, la personalidad, para que pueda resucitar después un nuevo ser, como el
ave fénix que resucitó de sus propias cenizas. Con la muerte simbólica de la
personalidad viene el nacimiento al Reino de Dios o Mundo Espiritual.
Por eso
es conveniente hablar sobre la Muerte en el mes de Escorpio, porque hace
referencia a la muerte del mundo objetivo, a la muerte mística de la
personalidad, a la muerte de nuestro egoísmo, de nuestro orgullo y prejuicios,
etc. Esa es la muerte sin morir físicamente. Es “la muerte” que da lugar al
nacimiento espiritual.
Predicciones acerca de la muerte
Dentro
de los próximos años la realidad de la supervivencia y de la eternidad de la
existencia, habrán dejado de ser una incógnita para convertirse en una
convicción .No quedaran dudas de que el hombre al abandonar el cuerpo físico
continúe siendo una entidad viviente y consciente. Se sabrá que continúa su
existencia en un mundo más allá del físico y que vive, está despierto y es
consciente. Esto se comprobará de diversas maneras por:
El
desarrollo de un poder dentro del ojo físico del ser humano que revelará el
cuerpo etérico y se verá que los hombres ocupan ese cuerpo.
El
creciente número de personas que tienen el poder de emplear el “tercer ojo” que
ha despertado nuevamente, demostrará la inmortalidad.. porque verá fácilmente
al hombre que ha abandonado sus cuerpos etérico y físico.
Un
descubrimiento, en el campo de la fotografía, comprobará la supervivencia.
Por
medio de la radio, con el tiempo se establecerá comunicación con aquellos que
han pasado al más allá, y esto se convertirá en una verdadera ciencia.
El
hombre será sensibilizado a tal grado de percepción y contacto, que le
permitirá ver a través de las cosas y revelará la naturaleza de la cuarta
dimensión y fusionará en un nuevo mundo los mundos subjetivo y objetivo. La
muerte ya no inspirará terror y desaparecerá el temor particular que provoca.
Estas
predicciones aparecieron a principios del siglo XX y se dijo que se
desarrollarían entre este siglo y el siglo XXI. Otros Maestros han hecho
hincapié en este sentido anunciando que la era de Acuario traerá el fin de la
muerte tal como la conocemos.
El miedo a la muerte
El
temor a la muerte es una de las grandes anormalidades o distorsiones de la
verdad divina, de las cuales son responsables los Señores del Mal Cósmico
Inicial. Cuando en las primitivas épocas atlantes surgieron del lugar donde
habían sido confinados y obligaron a que la Gran Logia Blanca se retirara
temporariamente a niveles subjetivos, su primer gran acto distorsionador fue
implantar el temor en los seres humanos, comenzando con el temor a la muerte.
Desde ese momento los hombres han puesto el énfasis sobre la muerte y no sobre
la vida, y cada día han sido dominados por el temor..
Uno de
los actos iníciales del Cristo y de la Jerarquía, cuando reaparezcan, será
erradicar este temor particular, y confirmar en las mentes de los pueblos la
idea de que encarnar y tomar forma es el verdadero lugar de oscuridad para el
espíritu divino, que es el hombre; temporariamente es la muerte y el
aprisionamiento del espíritu. Se enseñará a los hombres que la evolución es en
sí misma un proceso iniciático que conduce de una experiencia viviente a otra,
culminando en la quinta Iniciación de la Revelación y en la séptima Iniciación
de la Resurrección.
Los
hombres temen a la muerte:
Porque
aman excesivamente lo material y detestan perder el contacto con el aspecto
forma de la naturaleza.
El
terror, en el proceso final del desgarramiento en el acto de la muerte.(el
desgarramiento no existe, solo en los casos de muerte violenta o repentina, lo
único desagradable es la sensación instantánea y abrumadora de peligro y
destrucción inminente y algo que se parece a un shock eléctrico)
El
horror a lo desconocido y a lo indefinido
La duda
respecto a la inmortalidad.
El
pesar por tener que abandonar a los seres queridos o ser abandonado por ellos
Las
antiguas reacciones a las pasadas muertes violentas, arraigadas profundamente
en el subconsciente
Las
viejas y erróneas enseñanzas referentes al cielo y el infierno, siendo ambas,
perspectivas desagradables para cierto tipo de personas.
La cremación
Es algo
afortunado y feliz que la cremación se vaya imponiendo acrecentadamente. Dentro
de poco tiempo la tarea de sepultar a los muertos en la tierra será contraria a
la ley, y la cremación obligatoria una medida saludable y sanitaria.
Desaparecerán eventualmente esos lugares síquicos e insalubres llamados
cementerios.
Mediante
la aplicación del fuego, todas las formas son disueltas; cuanto más rápidamente
se destruye el vehículo físico humano, con más rapidez se rompe el aferramiento
del alma que se retira. Donde se practica la cremación no sólo se logra la
inmediata destrucción del cuerpo físico y su restitución a la fuente de
sustancia, sino que el cuerpo vital también rápidamente se disuelve y sus
fuerzas son arrastradas por la corriente ígnea al depósito de energías vítales.
La
cremación debe producirse entre las 12 y las 36 horas después del
fallecimiento.
La
cremación esotéricamente hablando es necesaria por dos razones importantes.
1.-Acelera
la liberación de los vehículos sutiles del cuerpo eterico, produciendo así la
liberación en pocas horas en lugar de unos cuantos días.
2.-Purifica
el plano astral e impide al deseo “la tendencia al descenso” que obstaculiza
grandemente al alma encarnante. No encuentra ningún punto de enfoque, porque el
fuego repele esencialmente el aspecto de crear formas que posee el deseo y es
una expresión mayor de la divinidad con la que no tiene una verdadera relación
el plano astral, siendo enteramente creado por el alma humana y no por el alma
divina.
La inmortalidad
¿Qué es
la inmortalidad?
Comúnmente
se piensa que la inmortalidad es vivir infinitamente con el mismo cuerpo y en
base a ello se intenta alargar la vida de cualquier forma o manera.
La
realidad es que la inmortalidad es el resultado de haber alcanzado un grado de
evolución tal que permite al ser humano no perder la consciencia de lo que es
realmente en el intervalo de muerte y renacimiento, es decir siempre es
consciente de su Alma este en un cuerpo físico o no. En términos de Discipulado
equivale a la tercera Iniciación.
En las
escuelas espirituales la primera técnica es trabajar con la técnica de la
inmortalidad, mas que adquirir sabiduría porque la sabiduría que se adquiere se
pierde junto con el cuerpo sino se ha elaborado la inmortalidad.
Notas para la reflexión y el
trabajo en grupo
???? La
falta o ausencia de consciencia es la muerte
????
Entre el intervalo que hay entre la muerte y el nacimiento no tiene lugar
ningún tipo de evolución.
????
Para el aspirante, la muerte es la entrada inmediata en una esfera de servicio
y de expresión a que está muy acostumbrado, percibiendo enseguida que no es
nueva. En las horas de sueño ha desarrollado un campo de servicio activo y de
aprendizaje. Ahora sencillamente funciona en él durante las veinticuatro horas,
en vez de las breves horas de sueño en la tierra.
????
Pensar que en el momento que dejamos el cuerpo físico lo consideramos que
morimos es ignorancia y que es ignorancia lo demostró hace 2.000 años
Jesucristo por dos veces, una cuando fue crucificado y apareció luego en carne
y hueso y la otra cuando resucito a Lázaro, si Lázaro no hubiera estado allí
presente después de muerto no podría haber entrado de nuevo en su cuerpo. Eso
demuestra que también sin el cuerpo estaba existiendo.
???? La
enfermedad puede constituir una muerte gradual y lenta y así liberar al alma.
Entonces no será posible la curación, no obstante son necesarias medidas
paliativas y sedativas y ciertamente deberán ser aplicadas.
Practica para ir a dormir
ANTES
DE IRSE A DORMIR
Hay un
procedimiento aconsejado para todos los días antes de irse a dormir, que
consiste en “restituir” los elementos del cuerpo a los elementos naturales,
eliminar los pensamientos e integrarse con el Alma Universal.
Los
pasos para este procedimiento son los siguientes:
a)
Restituir los elementos del cuerpo.
Proponer
la restitución de los cinco elementos del cuerpo a su origen natural; es decir,
restituir la materia sólida del cuerpo a la materia del planeta, el agua del
cuerpo al agua del planeta, el fuego del cuerpo al fuego del planeta, el aire
del cuerpo al aire del planeta y el éter del cuerpo al éter del planeta. De
esta manera se restituye el cuerpo a sus orígenes. Se trata sólo de una
propuesta, algo que nos imaginamos que se transforma en visualización.
b)
Suspender los deseos y pensamientos.
Una vez
restituido el cuerpo, nos quedamos con nuestros deseos y con los pensamientos
relativos a ellos. Podemos proponer su suspensión hasta el día siguiente,
porque no podemos hacer nada con ellos mientras dormimos. Eliminémoslos
diciéndoles: “Hasta mañana”.
c)
Olvidarnos del nombre.
Una vez
restituido el cuerpo y eliminados los pensamientos (secundarios), queda solo
nuestro yo como Alma individual, con la etiqueta del nombre. Despeguemos esa
etiqueta, pues de nada sirve para dormir. El nombre es una facilidad para
actuar en el mundo exterior; de otro modo no tiene sentido. Despeguemos
conscientemente la etiqueta del nombre. ¡Nos quedamos solos y desnudos!
Desnudos porque ninguna cosa nos rodea. En este sentido se dice que el Iniciado
es un “ser desnudo”. Hay una afirmación oculta, erróneamente entendida en
Occidente, que dice: “Permanezcamos desnudos al dormir”. El occidental tomó el
significado exotérico y duerme exotéricamente desnudo.
Estar
desnudos, estar solos como Alma individual. Llegados a este estado no tenemos
ya nombre, ni pensamiento, ni cuerpo. Integrémonos conscientemente con el Alma
Universal y esperemos. Así nos quedamos dormidos.
d)
Recordar que somos el Alma.
Cuando
llevamos a cabo este procedimiento todos los días antes de irnos a dormir, al
despertamos, la primera cosa que recordamos es que somos el Alma
individualizada. Luego recordaremos nuestro nombre, como primera
circunscripción, volvemos a acordamos de los pensamientos relativos a nuestro
trabajo y componemos nuestro cuerpo para realizar las acciones a lo largo del
día.
Beneficios:
Al cabo
de 5 años nos ayuda a conseguir el arte de soltar, al cabo de 10 ó 12 años
podemos dominar este arte. Esta práctica le lleva a uno a darse cuenta de lo
que es el arte de morir. Lleva al no iniciado a estados de conciencia del
iniciado. Permite que nos liberemos de lo aferrados que estamos al cuerpo, a
las emociones y a los pensamientos. Esta liberación nos proporciona alivio y
paz, Esta situación de alivio y paz nos proporciona salud
ORACIONES
PARA ANTES DE DORMIR .
Amado
Señor
Ten
piedad de los pobres Y protégelos del invierno
Abriga
sus delgados cuerpos con Tus bondadosas manos;
Cuida
de los huérfanos que duermen en míseros hogares
y
sufren-el hambre y el frió.
Escucha;
eh Señor, el llamado de las viudas desprotegidas
y
trémulas de miedo por sus pequeños.
Ábrenos,
oh Señor, los corazones de todos los hombres,
Para
que puedan ver la desdicha de los pobres.
Ten
piedad de los sufrientes que golpean a las puertas,
Y guía
a los viajeros hacia cálidos sitios.
Cuida,
0h Señor, a las aves pequeñas Y protege a los árboles y a los
campos
de la furia de las tormentas;
porque
Tú eres compasivo y brindas amor.
INVOCACIÓN
PARA ANTES DE IRNOS A DORMIR
Le pido
a Dios que todos los seres duerman bien esta noche.
Que no
tengan conflicto, que no tengan pena,
Que no
tengan dolor.
Que
todos los seres tengan suficiente alimento que comer y que todos los seres
tengan suficiente cobijo para dormir. y que a todos los seres se les de la
suficiente medida de Luz Para experimentar la vida
PLEGARIA
PARA ANTES DE IRNOS A DORMIR
Que
podamos ser empleados mientras dormimos para ayudar a cualquier persona, a
cualquier ser, en cualquier lugar.
PLEGARIA
AL DESPERTARNOS
Estamos
dispuestos y disponibles para trabajar por el sufrimiento ajeno.
PLEGARIA
A LO DIVINO
¡Señor!
Dame el privilegio de servir a los seres
Concédeme
la amistad de aquellos que sirven como discípulos tuyos
Otórgame
compasión sin límites hacia todos los seres.
Trayambakam. El mantram de la
inmortalidad
trayambakam
yajamahe
sugandhim
pustí vardhanam
urvarukamiva
bandhanan
mrityor
mukshiya namrutat
SIGNIFICADO
VENERAMOS
AL “SER DE TRES OJOS”
QUE ES
FRAGANTE Y DADOR DE PLENITUD
QUE NOS
LIBERE DE LA MUERTE Y
NOS
LLEVE A LA INMORTALIDAD,
IGUAL
QUE EL PEPINO SE LIBERA
DE LA
MATA
Explicación:
“El
Señor de Tres Ojos” representa al Señor que impregna los 3 estados de
consciencia en nosotros.
El ojo
izquierdo representa la vista; el ojo derecho representa la sabiduria. El
Tercer Ojo representa la visión.
Aquel
en que funcionan los tres ojos está más allá de la muerte.
Siva el
Señor, Señor de la Voluntad, es invocado mediante este himno para que nos
otorgue la inmortalidad liberándonos de la muerte.
Los
tres ojos corresponden también a: La Actividad Inteligente, el Amor-Sabiduría y
la Voluntad.
Uno
tiene que meditar en los tres ojos en relación con los tres Logos y sus
cualidades.
Se
recomienda que este mantram se contemple en el Centro de Ajña visualizando la
Luz.
Los
tres ojos (las tres luces) son la causa de los tres mundos. El hombre está
condicionado por esos tres mundos.
La
contemplación en las tres luces ha de producir la necesaria transformación como
para liberarse del condicionamiento.
Estar
en el mundo pero no estar condicionado por el mundo es maestría. Este mantram
propone ese estado de liberación.
El
hombre está condicionado por lo que posee física, emocional y mentalmente.
-Físicamente
posee artículos, cosas, propiedades, cuentas bancarias.
-Emocionalmente
posee a la gente de su elección, como la familia, los amigos, conocidos, etc.
Posee a los demás también mediante las emociones negativas como el odio, las
antipatías, las discordias, la envidia, la malicia, etc.
-Mentalmente
posee sus propias ideas de lo correcto e incorrecto acerca de los diversos
aspectos de la vida.
Hasta
que uno no se deshaga de estas posesiones, no será libre y será como un fruto
verde pegado a la mata (o al árbol).
Este
mantram es una oración para liberarse del cuerpo triple y sin embargo
permanecer con él para fines de buena voluntad, de tal modo que cuando se haya
cumplido el propósito de la vida, se pueda realizar una partida consciente, que
se llama: “Trascender la muerte”.
Se
recomienda que este mantram se pronuncie 3, 11, o 33 veces.
El
propósito de este mantram es buscar la trascendencia de la muerte o Mrityunjaya
Sugerencias para ayudar a los que
están en el proceso que llamamos muerte.
Visitar
a las personas que están enfermas, llevarles flores, intercambiar una charla
agradable y reconfortante, asegurarnos de su comodidad, si no se encuentra bien
o esta incomodo invoquemos mucho el color azul y transmitamos ese color azul a
su centro Ajña (entrecejo) y poco a poco se quedaran dormidos.
Cantar
mentalmente el Mantram OM NAMO NARAYA NAYA. Esto ayuda en gran medida a invocar
el color azul y llenar la habitación en la que está esa persona de color azul.
Hay que asegurarse de que se transmite a través del centro Ajña hasta el
corazón. También asegurémonos de tener un contacto con el alma de la persona y
no con la personalidad. No sintamos respecto a ellos una relación mundana como
la que solemos tener, sino que sintamos que son un alma como nosotros.
Construyamos
un triangulo entre nosotros, el paciente y el Maestro a quien más queramos
recemos o veneremos. Desde el centro del corazón del Maestro hasta nuestro centro
Ajña (inhalando) y de aquí a nuestro centro del corazón y desde allí al centro
Ajña del paciente (exhalando) y a su centro del corazón y desde allí al centro
del Corazón del Maestro, así completamos el triangulo.
Asegurarnos
de que no hay nada negativo en torno al paciente, como gente llorando o
lamentándose etc.
Podemos
guiar al alma haciendo que salga por los centros superiores, como el centro
laríngeo, el Ajña, mediante nuestra sugerencia tenemos que guiarle hacia la
parte superior de la cabeza en la que hay siete salidas u orificios.
Si está
consciente podemos preguntarle si hay alguna tarea que él o ella sientan que no
han completado, pues eso le dará paz y le ayudara a desapegarse.
Cuento:
EL
ÁNGEL DE LA MUERTE Y EL ÁNGEL DE LOS RENACIMIENTOS
En una
noche de Enero, iluminada solamente por un tenue rayo de Luna creciente y de
algunas pálidas estrellas, el Ángel de la Muerte y el Ángel de los
Renacimientos se encontraron en una gran aldea donde su misión les llamaba. Las
calles estaban desiertas, el silencio era profundo y las casas cubiertas de una
capa de nieve; también dormía la fuente de la plaza, pues el agua pura de
murmullo argentino, se había transformado en estalactitas de hielo. Los ángeles
se pararon en una grada de la fuente frente dos casas contiguas, en las que
algunas ventanas estaban iluminadas. Sacudieron la nieve de sus grandes alas y
se sentaron uno junto al otro con la satisfacción de dos compañeros de labor
que descansan un momento. El Ángel de la Muerte estaba tranquilo y meditabundo.
Su hermosa cara marmórea, con sus dulces ojos, estaba orlada de espesos y
obscuros bucles. Su aspecto tenía algo de misterioso y augusto.
El
Ángel de los Renacimientos era esbelto y vigoroso, su cara redonda estaba
iluminada por una mirada viva y escrutadora; toda su actitud delataba una
intensa actividad.
-Hermano-dijo
dirigiéndose al Ángel de la Muerte-no es raro que nuestro ministerio nos
conduzca a los dos a un mismo sitio; tú a buscar un alma, y yo a buscar otra.
Pero es raro que los dos equivoquemos la hora, pues esta noche llego algo
temprano. . .
-A
mí-respondió melancólicamente el Ángel de la Muerte-no me sucede lo mismo. He
llegado mucho antes que el reloj diera las doce; el que venía a buscar,
permanecía suspendido sobre su techo, mirando sin comprender, el cadáver que
acababa de abandonar. Al ir a llevármelo, rompiendo la última ligadura que a su
cadáver unía, oí una explosión de dolor. El médico acababa de comprobar que el
corazón acababa de latir, y los miembros de la familia, rodeándole, le
suplicaban que volviera la vida a su querido difunto. He aquí que entonces tuvo
lugar una escena que he presenciado más de una vez. El médico sacó de su
bolsillo una redoma de cristal, y adaptando a ella un pequeño instrumento, dio
una inyección al cuerpo abandonado. El efecto fue instantáneo. Como un relámpago
fue arrancado de mis brazos el pobre hombre lanzado de nuevo en aquel cuerpo
corrompido y envenenado por la enfermedad. Y le vi. despertar, contraído el
rostro por un gran sufrimiento, gimiendo penosamente, mientras que a su
alrededor se producía una expansión de alegría y reconocimiento. Me he visto
obligado a marcharme; el desgraciado sufrirá algunas horas más, pues su destino
debe cumplirse antes de que la aurora ilumine la nieve de las cercanías. Su
familia sabía que no tenía salvación, pues la ciencia de los hombres y la
ciencia más elevada lo consideraban así. Pero ellos han preferido conservarlo
algunas horas más prolongando su tortura.
-Los
hombres son crueles-dijo el Ángel de los Renacimientos, moviendo la cabeza.
-No,
Hermano, son ignorantes e inconsecuentes. Me temen, tienen miedo a esta otra
vida que no conocen. Cuantas veces he sido invocado, llamado a gritos por los
desesperados; pero apenas aparezco, se tapan los ojos con un gesto de terror y
me suplican que les deje tranquilos… como si dejar este mundo físico fuese
poner término a su existencia.
-Ah!
qué insensatos son los hombres, Hermano mío. En su infancia, en el regazo de su
madre, aprenden que su alma es inmortal, se les enseña diariamente en sus
iglesias, más obran como si nada supieran.
Pierden,
en apariencia, un miembro de su familia, un amigo. ., todo es sollozar,
sentimientos, despedidas, como si jamás no hubiesen de volverse a ver. Se
visten de negro y se reúnen con fúnebres semblantes. Me consideran como el
enemigo de la raza humana, yo soy un bienhechor… pues yo cierro los ojos que
vierten lágrimas amargas; yo pongo el sello de la suprema belleza en los
rostros contraídos; yo libro de una morada camal, ajada por la enfermedad o la
vejez a un alma que aspira a una nueva vida; yo reúno a los que se habían
perdido de vista. ¡Oh, qué júbilo el verse de nuevo en el más allá…! ¡La
alegría del recibimiento hecho a los que penetran en otra esfera, que se abre a
una vida más intensa!… ¡Oh el regocijo de las ilusiones mecidas por sublimes
armonías!
¡Pobres
ignorantes! Ellos, que más que nada temen el sufrimiento, ¿por qué temen tanto
este paso que conduce a una vida mejor?.. pues tras un corto intervalo en el
valle de las sombras y de la purificación, sus seres queridos estarán por mucho
tiempo en la mansión de la paz y la beatitud. El Ángel de la Muerte calló con
un suspiro.
-Tu
conclusión, Hermano, es la siguiente-dijo el Ángel de los renacimientos,
tomando la palabra-: que los hombres lloran cuando deberían regocijarse. Y yo
añado: “y se regocijan cuando deberían llorar”.
-Tú me
hablas de los que se afligen, procurando retener cerca de sí el alma libertada,
sin pensar que prolongan su tortura. Tú hablas de los que te invocan, y cuando
escuchas sus ruegos se asustan y rehúsan seguirte. Más ¿qué piensas de los que
celebran alegremente la venida de un alma entre ellos, que la acogen llenos de
esperanza, con sueños de gloria o de belleza? La vuelta a la vida terrestre,
sin embargo, podría ser origen de preocupaciones dolorosas, pues los hombres
ignoran los misterios que el porvenir les reserva. .. la lucha febril que
destroza el cuerpo y el alma, el peso que a veces aplasta a los hombres, las
crueles decepciones, el dolor de las separaciones, el incesante tormento que
causa la vana persecución de la dicha humana, frágil felicidad; felicidad
engañosa como un espejismo… El hombre sufre de la cuna a la tumba, maldice la
vida y, sin embargo se aferra a ella desesperadamente.
Entonces
el Ángel de los Renacimientos, separando un pliegue de su vestido mostró al
Ángel de la Muerte un desdichado ser adormecido con el sueño PRE-natal.
-Mira
esta pequeña alma, Hermano, un alma joven en verdad, que lleva consigo todos
los gérmenes del vicio, todos los instintos de pasión. La ley de justicia
inmanente, por la cual el hombre cosecha lo que ha sembrado, va a hacerla
renacer en este medio honrado. Los que van a ser sus padres, en un pasado
lejano pecaron gravemente contra él y contra la ley de la fraternidad. He aquí
llegada la hora de la retribución. Esta pequeña alma va a llevar bajo ese techo
la desunión y la discordia, hará verter lágrimas a mares, destrozará los
amantes corazones, y puede ser que deje tras sí las huellas sangrientas de un
Crimen.
He aquí
cómo podrían llorar los que meciéndose en los sueños de oro de tiernas
ilusiones, han preparado amorosamente la frágil cuna que abrigará a su hijo.
¡Qué desgracia la de los humanos! Sólo ven las apariencias y no la realidad;
sólo se apegan a las ilusiones del mundo perecedero y no lo que se oculta
detrás de las ilusiones; ven sin mirar, oyen sin escuchar, andan a tientas sin
hallar su camino… Y no obstante, la gran luz está allí, envolviéndolos…
armonías celestes se levantan a su alrededor, más son inconscientes de la
brillante luz, así como del glorioso canto de la VIDA que no comprenden.
-Hermano-dijo el Ángel de la Muerte con tranquila sonrisa-son más dignos de
compasión que de censura. Sólo merecen indulgencia y compasión.
En este
momento el reloj de la aldea dio cuatro campanadas.
-Ha
llegado la hora de cumplir nuestra misión-dijo el Ángel de los renacimientos,
levantándose lentamente.
-Hermano,
¿nos separamos afectados por una impresión tan-triste?
-No,
por cierto-añadió el Ángel de la Muerte levantándose lentamente y batiendo sus
grandes alas. No; pues una gloriosa esperanza ilumina el porvenir…
-Vendrá
un tiempo, lejano, remoto, en que una nueva era aparecerá, y mi ministerio no
se cumplirá ya con esfuerzo y entre gemidos y lágrimas; vendrá un tiempo en que
los ¡hosanna! Acogerán mi entrada en las casas; en que no seré ya considerado
como “el rey del terror”, sino como un amigo, el supremo libertador; en que los
grandes y pequeños me tenderán los brazos sonriendo. -Pues en esta nueva
era-dijo a su vez el Ángel de los Renacimientos con vibrante voz- en esta nueva
era, gracias al conocimiento adquirido, gracias a su desarrollo interior, el
hombre leerá en sus vidas anteriores como en un libro abierto; por el poder de
su pensamiento y por la pureza de su amor, podrá reparar las faltas cometidas
en el pasado contra su prójimo y no atraerá hacia sí sino seres purificados,
amantes y armónicos.
-Adiós,
Hermano, ya es hora de que nos separemos. Se tú el libertador, como yo seré el
justiciero.
Los
ángeles emprendieron su vuelo.
Algunos
instantes después el silencio de la aldea fue turbado por los gritos y gemidos
que partían de una ventana entreabierta. .. en tanto que el Ángel de la Muerte
se elevaba por los aires llevando consigo el alma liberada y en la casa
contigua, una joven madre, meciendo un recién nacido entre sus brazos, decía
sonriente a su esposo tiernamente inclinado sobre ella: “¡Mira qué hermoso es
nuestro hijo”! ¿ Verdad que se parece al niño Jesús?”
Fuente:AiméeBlench
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