Este ritual es muy antiguo, de los que no salen en los libros. Es un ritual de brujas, de esos que solo se cuentan en una noche de aquelarre.
Existen
tres niveles para este mismo ritual. El más bajo es para aprendices de Bruj@,
el intermedio es para Bruj@s un poco más experimentados y el de nivel superior
es para las brujas con amplia experiencia.
Este es el
ritual propio de principiantes para que tod@s puedan acceder a él y realizarlo
sin mayor complicación.
Elementos
1 Vela blanca + 1 Vela negra
1 Vela azul claro o plateada
Imagen de una trinqueta
Canela
Sal
1 Hoja de Laurel seca
Proceso
Sumerge
las velas en agua y sal, cuidando de no mojar las mechas, durante 7 minutos.
Limpia la hoja de laurel con un algodón humedecido en agua y sal o con unas
gotas de ruda o agua de azahar. Seca bien las velas y la hoja de laurel con un
papel o tela blanca y lo dejas envuelto hasta la noche.
De noche
dibuja la trinqueta, utilizando la canela y la sal para perfilar el dibujo.
Seguidamente deberás colocar las velas. Primero la blanca que situarás a la
izquierda porque es donde se halla el corazón y los sentimientos más puros. En
segundo lugar pones la vela negra a la derecha y en la parte de arriba la azul
o plateada. Asegúrate que sigues este orden.
Ahora, en
la hoja de laurel escribes el nombre completo de la persona para la que vamos a
realizar la petición. La tomas en tus manos y visualizas a la persona en
cuestión y en lo que quieres pedir. Coloca la hoja de laurel en el centro de la
trinqueta y procede a prender las velas en el mismo orden en que las has
colocado. Las velas deberán dejarse consumir, procurando que se mantengan
encendidas un mínimo de 4 horas.
Seguidamente,
pronuncia la siguiente oración y procura hacerlo desde el corazón.
Que está
persona (nombre y apellidos para quien se pide) encuentre el equilibrio, el
camino y su guía. Que la tristeza y la confusión se conviertan en claridad he
ilusión. Que todo mal o enérgica negativa se deshaga por el camino.
El yin y
el yang fusionan su poder para que esta persona pueda renacer con fortaleza,
alegría y el amor siendo su guía. Estas tres velas ahora juntaran su luz para
iluminar tu camino entre tanta oscuridad.
Os pido vuestra ayuda y poder, para ejercer la magia para (pronuncia el nombre
de la persona) ella o para él, encontrar la claridad que tanta falta le hace
entre tanta oscuridad. Que así sea, que así sea, que así sea.
Termina el
ritual dando las gracias a todas las fuerzas que se unen y luchan contra lo que
nos hace daño. Quema la hoja de laurel, pasándola por la llama de cada una de
las velas, en el orden en el que se han prendido. Los restos se esparcirán en
la base de un árbol o planta que sea muy fuerte y si es posible que tenga
bonitas flores. Es preferible realizarlo antes de que la luna comience a
menguar, si no es posible realizarlo en la misma noche, hacerlo sin falta al
día siguiente.
Para hacer
el ritual para un mismo, tienes que seguir las mismas pautas, pero con la
siguiente oración:
Ayúdame
universo, a no sentirme perdid@, a que encuentre el equilibrio, mi camino y mi
guía. Que la tristeza y la confusión se conviertan en claridad he ilusión. Que
todo mal o enérgica negativa se deshaga por el camino. El yin y el yang,
fusionan su poder para que puedan ayudarme a renacer, con fortaleza, alegría y
el amor siendo mi guía . Estas tres velas ahora juntaran su luz, para iluminar
mi camino entre tanta oscuridad .Os pido vuestra ayuda y poder, para ejercer la
magia y encontrar la claridad que tanta falta me hace entre tanta oscuridad.
Termino el ritual dando las gracias a todas las fuerzas que se unen y luchan
contra lo que nos hace mal. Que así sea, que así sea, que así sea.
Termina el ritual de la misma forma que lo harías para pedir por otra persona.
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