La mejor manera de evitar que los estados
emocionales de los demás te afecten es comprobar tu propia energía justo al
despertar por la mañana. A partir de entonces, monitoriza tu estado emocional
continuamente a lo largo del día.
Al cabo
de poco tiempo te habrás acostumbrado a comprobar tus estados emocionales y
pensamientos. Cuando estés con alguien presta atención a cómo te sientes.
Te
sientes mejor o peor?? De repente te sientes turbado, angustiado o más feliz??
Si no te gusta lo que sientes, vuelve automáticamente al estado en el que te
hallabas por la mañana al despertar. Será fácil recordar ese estado porque ya
te habrás acostumbrado a hacer este tipo de comprobaciones.
Sin
ninguna duda, este procedimiento te será de gran ayuda en tu vida
cotidiana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario