Observando
la forma de nuestros dedos podemos saber un poco más de nosotros mismos y
probablemente descubrir algo que desconocíamos.
Ahora
observa tus propios dedos y fíjate bien a qué dedo del dibujo se parece más.
Si la forma de tus dedos es de
tipo A:
Tiendes
a interiorizar los pensamientos y los sentimientos, y eres una persona
melancólica. A menudo, pretendes ser más fuerte e independiente de lo que eres
en realidad. Eres una persona muy emocional. Te comportas impecablemente con
aquellos que te rodean, una vez que los conoces mejor. Eres una persona
correcta y detestas la mentira, la hipocresía y el engaño. Te muestras como una
persona poderosa y serena. Raramente exteriorizas tus sentimientos. Eres un
poco excéntrico y arrogante. Muchas cosas que suceden a tu alrededor te
molestan. Eres una persona magnánima y altruista. Haces cualquier tarea que te
pidan, incluso si no te agrada. Eres una persona muy divertida, y actúas con
serenidad incluso en las situaciones más negativas. Traicionas fácilmente tus
pensamientos y emociones a través de la expresión facial y a través de tus
gestos. Tienes una actitud distante hacia los extraños, y te involucras mucho
en las relaciones con tus seres queridos.
Si la forma de tus dedos es de
tipo B:
No te
gusta tomar la iniciativa para conocer nuevas personas. Eres una persona muy
leal. Una vez que te enamoras de alguien, concentras toda tu atención en esa
persona. Tienes una naturaleza muy sensible, aunque pocos lo saben, ya que
tiendes a reprimir tus pensamientos y sentimientos, intentando evitar a los que
te rodean. Una vez que tomas una decisión, nada puede detenerte en tu camino.
Siempre sigues los planes establecidos. Tienes miedo de ser herido. Finges que
todo está bien cuando estás solo, incluso si las cosas son exactamente lo
opuesto. Mantienes la calma incluso en momentos muy delicados. Te esfuerzas
mucho por parecer una persona fuerte e independiente, cuando en realidad tu
esencia es puramente sensible. Eres un soñador y construyes muchas proyecciones
sobre un plan ideado. Sueñas con encontrar algún día a esa persona que te
comprenderá por completo y te amará incondicionalmente.
Si la forma de tus dedos es de
tipo C:
No te
gustan los desafíos. No quieres tratar con cosas nuevas y desconocidas.
Respetas las opiniones de los demás. Te pones nervioso muy rápido y sobre todo
por cosas pequeñas. A veces puedes volverte arrogante, especialmente cuando la
discusión en la que estás involucrado es contradictoria. Debido al hecho de que
te pones nervioso rápidamente, la discusión puede transformarse muy fácilmente
en una pelea. Lo bueno es que te das cuenta si estás equivocado y tienes el
poder de saber pedir disculpas. Mantienes tus problemas y sentimientos solo
para ti. No te gusta fingir. Sabes muy bien lo que te gusta y lo que no. Te
gusta confiar en las personas y que ellos confíen en ti. Tienes un corazón
grande que puede lastimarse fácilmente. Cuando alguien te pide disculpas, lo
perdonas sin pensar más.
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