Esta es, sin duda,
una meditación muy especial, ya que nos permite viajar del macrocosmos al
microcosmos y viceversa. Espero que os agrade y sea de utilidad para comprender mejor nuestro mundo.
La primera vez que la realicé, y de esto hace ya
muchísimos años, tuve una sensación realmente abrumadora, sobretodo al salir al
espacio exterior, tanto, que aún hoy tengo muy viva la impresión que esto causó
en mí.
Con la práctica, en
posteriores ocasiones, me fui acostumbrando a la impresionante sensación de
amplitud que el espacio generaba en mi persona y hoy en día aquello es solo una
anécdota en mi trayectoria como maestra de meditación, un recuerdo que ha
permanecido en mí para podéroslo trasladar a vosotr@s, y en caso de que a
alguien le suceda lo mismo, tenga presente que se trata solo de una mera
sensación nada más y que la meditación es por supuesto totalmente segura y
puede abandonarse simplemente abriendo los ojos y enfocándose en algo tangible
de nuestra dimensión.
Espero de corazón que
esta experiencia sea muy agradable y os permita conocer las maravillas que
envuelven al ser humano, de las que tan poco consciente es.
No hay comentarios:
Publicar un comentario