A
veces es necesario tener agua bendita cerca para algún trabajo mágico o no tan mágico
y resulta que no tenemos una iglesia cerca. Vamos a ver cómo convertir agua de
manantial en maravillosa y útil agua bendita. Espero que os agrade.
Elementos:
1
Bol o cuenco de cristal o cerámica
250cc de Agua
de lluvia, mineral o de manantial
Unas
hojas de olivo
1 Cucharada de sal
Procedimiento:
Para
llevar a cabo cualquier procedimiento mágico, es preciso que nuestra mente y
nuestras emociones se hallen en perfecta calma y armonía. Una vez estés preparad@,
toma el bol y vierte el agua, a la que añadirás las hojas de olivo y un puñado
de sal. Seguidamente, y siendo muy consciente de la importancia de este ritual,
bendícela con la señal de la santa Cruz y pronuncia la siguiente oración:
Yo te bendigo con el permiso del Señor mi Dios, en
el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Por el poder de los ángeles y en virtud de lo que
voy a realizar para el bien de mi persona, sin ofensa ni mala intención, solo
para engrandecimiento de mi Señor Jesús. Amén.
A
continuación, reza tres Padrenuestros y tres Credos. Ahora tu agua bendita está
lista para ser utilizada siempre con buenos propósitos.
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