De vez en cuando tod@s
buscamos respuestas para las preguntas importantes de la vida.
Obtener estas respuestas psíquicamente es más rápido y más sencillo de lo que parece.
El
método es simple, como veréis.
1. Realizar
una pregunta sencilla y directa.
2.
Mirar hacia nuestro interior y observar los símbolos y las sensaciones que
percibimos, confiando en todo lo que se obtiene.
3.
Interpretar los símbolos recibidos y mantener la confianza.
Como
veis, este es uno de los procesos para trabajar con símbolos psíquicos más sencillos
que existen. Para realizar la pregunta debemos hacerlo con una que solo pueda
ser respondida con un sí o un no y además hacerlo en positivo, ya que nuestra
mente no comprende las negaciones en este estadio. Por ejemplo: Debería
mantener este trabajo? Esta es una pregunta simple y directa.
Esta
pregunta la mantendremos en la mente y cerraremos los ojos para podernos
enfocar en ella con mayor facilidad.
A continuación,
imaginamos un semáforo. Puedes verlo o simplemente sentirlo. Debe ser un semáforo
sencillo para facilitar la visualización o sensación al máximo. En cuanto lo
tengamos presente, observaremos si la luz es roja, amarilla, verde o incluso si
cambia de color mientras lo observamos con atención.
Lo
que se reciba será la respuesta a nuestra pregunta. Si la luz es verde, es un claro
Sí como respuesta; si el color es rojo, es un No. Incluso si se enciende la luz
amarilla o si las luces verde y roja parpadean intercambiándose, es una
respuesta. El amarillo y el rojo y verde parpadeando y cambiando continuamente,
significan que todavía no es el momento porque no se tienen todos los datos. En
este caso, deberemos formular nuevamente la pregunta pasado un tiempo.
Este
sencillo proceso se utiliza para obtener respuestas simples, pero debéis tener
en cuenta que las todas respuestas existen ya y que solo debemos preguntar para
obtenerlas.
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