LA MAGIA DE LA COSTURA - TECNICA + HECHIZO

Es posible tejer o confeccionar prendas en las que incluir la magia en nuestra vida diaria y que nos ayuden en nuestros propósito y metas.

Podemos utilizar la magia de la costura para hacer que una prenda que tejamos o confeccionemos nosotros mismos funcione para aquello que deseemos. Así, confeccionaremos la prenda acorde a la parte del cuerpo que vaya a tener relación con nuestra petición. Por ejemplo, un escritor suele trabajar en un ordenador o computador, por ello, diremos que utiliza sus dedos, sus manos para escribir igual que hago yo en este momento. Por ello, podríamos confeccionar unos guantes sin dedos, por ejemplo, para poderlos utilizar mientras trabajamos y que la magia funcione para ayudarnos en nuestro trabajo, haciendo fluir las palabras a nuestra mente y manos,  y eligiendo las palabras más claras y correctas.

También podríamos confeccionar un gorro de lana o un pañuelo para la cabeza, por ejemplo, para que nuestras ideas fueran las mejores y más correctas para llevar una vida sana, salir a correr al parque, comer mejor, etc. Entonces, cada vez que nos pusiéramos ese gorro en concreto, tendríamos más ganas de vivir de manera sana y por tanto nuestros actos estarían relacionados con ello.

Por supuesto, podemos confeccionar cualquier tipo de prenda y hacer que adquiera las propiedades mágicas que deseemos a través de un hechizo. También será conveniente escoger bien el color o colores, para que se avengan con nuestra petición.

Blanco: purificación, claridad, verdad.

Negro: destierra la negatividad, protección, trance.

Rojo: pasión, amor, lujuria, coraje, fuerza, fuerza vital.

Rosa: amistad, amor propio, compasión, empatía, curación emocional, lo femenino.

Amarillo: alegría, energía, creatividad, inteligencia, sabiduría.

Naranja: éxito, poder, aliento, confianza, autoridad, tranquilidad, salud.

Verde: dinero, suerte, fertilidad, abundancia, crecimiento, riqueza, prosperidad, energía.

Azul oscuro: depresión, vulnerabilidad, cambios, intuición.

Azul claro: salud, paciencia, curación, paz, serenidad, meditación.

Púrpura: poderes psíquicos, sabiduría, intuición, conocimiento oculto, poder espiritual.

Marrón: relacionado con la tierra y los animales, conexión a tierra, estabilidad, equilibrio.

Plata: reflejo, canalización, neutralidad.

Oro: atracción, ganancia financiera, victoria, autoridad.

Una vez hayamos decidido la prenda que vamos a tejer o confeccionar, deberemos cargarla con las tareas mágicas que queremos que desempeñe. Para ello quemaremos un poco de romero, menta o lavanda y pasaremos la prenda a través del humo. Invocaremos el elemento aire y a cualquier deidad con la  que habitualmente trabajemos para bendecirla. Pronunciaremos en voz alta o en nuestra mente aquello que deseamos que haga la prenda en cuestión. Por ejemplo, y para utilizar el primer ejemplo del que hemos hablado, si un escritor quisiera cargar una prenda confeccionada por él mismo podría decir lo siguiente:

"Obtengo las mejores sugerencias, las mejores palabras, las más correctas vienen a mi mente continuamente. La escritura fluye de manera sencilla y estable".

Mientras pronunciamos nuestro conjuro, nos visualizaremos delante de nuestro ordenador, escribiendo de manera tranquila y exitosa, sin dudas y eligiendo las palabras más correctas en cada momento.

Cada conjuro se adecuará a las pretensiones de cada petición, tal y como ha explicado. Ya veis que se trata de un tipo de magia bastante simple que cualquiera puede llevar a cabo, siempre y cuando se haga de manera sería y con nuestra mente y emociones en completa calma. Os animo a probarla!!