La sociedad dicta que sigamos tipos de personalidad específicos proyectados por los principales medios de comunicación.
Es realmente triste y desconcertante, pero es la realidad en la
que vivimos. Y entonces, por qué los introvertidos tienden a rebelarse contra
estos estereotipos establecidos??
Los introvertidos tienden a buscar respuestas en
su interior en lugar de tener la necesidad de la aprobación social. A menudo,
los extrovertidos verán al introvertido como antisocial, engreído o solitario,
pero incluso con estas etiquetas, el introvertido se mantendrá firme sin tener
en cuenta cómo lo perciben los demás.
Si eres introvertid@ como yo misma, encontrarás
total comodidad en la soledad. A menudo te encuentras inmerso en un profundo
pensamiento y contemplación. La necesidad de aprobación por parte de los demás
es significativamente menor que la del extrovertido, ya que se da cuenta de que
todas las respuestas provienen al final de su interior.
Si bien puede participar en ocasiones sociales, a
menudo disfruta simplemente de observar el entorno que lo rodea en lugar de ser
el centro de atención, lo que muchos introvertidos intentan evitar. A nivel
metafísico, el introvertido se da cuenta de cómo todos estamos conectados y no
necesita la aprobación externa y la atención que a menudo buscan las personas
extrovertidas.
Aproximadamente el 75% de la población mundial son
extrovertidos, lo que hace que los introvertidos estemos claramente en minoría.
No obstante, los introvertidos no sucumben a la presión social para conformarse
o quedar bien.
Si bien algunos introvertidos pueden ser tímidos,
existe una gran diferencia entre la timidez y la introversión. La timidez es
una faceta de la ansiedad social y el miedo al rechazo, mientras que con la introversión
se tiene la capacidad de estar en una función social sin la necesidad de interaccionar
completamente con los demás. Por ejemplo, si el introvertido va a una fiesta, puede
entablar conversaciones con mucha facilidad y con muchas personas, pero a
menudo elige no hacerlo. El introvertido puede tener tendencias extrovertidas
sin dejar de ser introvertido. Por el contrario, el extrovertido también podría
tener tendencias introvertidas sin dejar de ser extrovertido.
Muchas personas introvertidas elegirán el momento
y el lugar para ser extrovertidas, como por ejemplo al esperar en la cola de un
supermercado. En esta situación, la conversación es limitada y no hay un
compromiso a largo plazo para continuar con ella, lo que permite que el
introvertido tenga una interacción social sin verse obligado a ello. En
cuestión de minutos, el introvertido volverá a encontrar la tranquilidad de ser
el observador.
Dentro de la soledad, el introvertido encuentra
mucho tiempo para reflexionar sobre la vida. Posiblemente tenga un pequeño
grupo de amigos cercanos y se sentirá cómodo estando rodeado de estas personas.
El extrovertido se sentirá incómodo cuando haya
una pequeña pausa en la conversación que sostiene, mientras que el introvertido
entiende que a veces no es necesario pronunciar palabras para apreciar la
compañía de la persona con la que se está. Un abrazo y una sonrisa hablan más
que las palabras para una persona introvertida.
El introvertido se divierte con el extrovertido y
observará su forma de proceder. Un introvertido tenderá a estar fuera de un
grupo, observando hacia adentro.
Los introvertidos prefieren observar, escuchar y
no hablar mucho, pero cuando están con personas cercanas, hablarán abiertamente
sobre las cosas que les apasionan.
Muchas personas dentro de la espiritualidad y la
metafísica son introvertidas y, a menudo, buscarán las respuestas en su
interior. Son más aptos para comprender el principio de unidad y cómo todos
estamos conectados a un nivel más profundo que el extrovertido, que busca continuamente
la aprobación a nivel físico.
Los introvertidos tienden a usar el lado derecho
de su cerebro y, a menudo, tienen inclinaciones musicales y/o artísticas.
También pueden ser poetas o filósofos y pueden ver fácilmente fuera de las creencias grupales o religiosas.
El introvertido cuestionará los orígenes de lo
que la sociedad nos ha dicho que es verdad y, a diferencia de un científico, no
necesita datos empíricos para mantener sus propias creencias. Los campos
metafísicos a menudo atraen a los introvertidos debido a esta razón.
El introvertido suele utilizar la reflexión interna,
ya que buscará respuestas en su interior frente a lo que se le haya enseñado.
El introvertido usará el discernimiento mientras sopesa lo que ha aprendido
externamente versus lo que siente que resuena como la verdad interna.
Personalmente, siempre me he dejado llevar por aquello que resuena en mí como
cierto, provenga de donde provenga.
Los introvertidos también suelen ser empáticos.
Su sensibilidad sobre cómo se sienten los demás tiende a aumentar en
comparación con el extrovertido, que está más consumido por cómo los demás se
perciben a sí mismos.
Los extrovertidos también pueden ser muy
espirituales y mostrarán su espiritualidad más abiertamente que los
introvertidos. Pueden hablar fácilmente con cualquier persona sobre temas
espirituales y metafísicos, mientras que el introvertido elegirá con quién
hablará sobre estos temas.
A pesar de ser solo el 25% de la población, los introvertidos
rara vez cambian su actitud o personalidad para quedar bien con los demás, aunque
a menudo hay una excepción. Muchos introvertidos han aprendido a ser
"extrovertidos temporales" en su puesto de trabajo, pero al final, su
zona de confort los lleva de vuelta a ser lo que realmente son, personas
introvertidas.
Está claro que la sociedad continuará
persuadiendo a los introvertidos para que nos convirtamos en lo que ésta desea,
para que formemos parte del pensamiento colectivo y puedan manejarnos con mayor
facilidad. No obstante, tengo claro que ningún introvertido se dejará persuadir
por la presión de grupo o para quedar bien con los demás porque sabe perfectamente
que la única verdad está en su interior.
No hay comentarios:
Publicar un comentario