SCRYING O LECTURA DE LAS NUBES – TECNICA

Llamamos Scrying al arte de buscar mensajes ocultos en diferentes objetos. La forma más habitual de escrutinio para la mayoría de las personas es la bola de cristal, pero cualquier objeto puede servir para practicar esta técnica, incluso las nubes, como veremos ahora mismo.

El Scrying de las Nubes es un tipo de mancia que podemos practicar en cualquier época del año y a cualquier hora del día o la noche, pero es sumamente agradable llevarla a cabo en los meses más cálidos del año, en los que uno puede estar en el exterior confortablemente.

Además, esta técnica tiene algunas ventajas sobre otro tipo de mancia. Por ejemplo, las nubes no tienen ningún coste económico, están siempre disponibles para cualquiera de nosotros en cualquier momento y además nos mantienen en contacto con la naturaleza.

Lo más importante es ser consciente que el Scying de cualquier tipo es esencialmente una meditación con los ojos abiertos. Cuando uno lo piensas de esta manera, lo básico se vuelve mucho más fácil, especialmente si se tiene experiencia con la meditación.

Al igual que la meditación ordinaria, despejar la mente se convierte en la tarea más importante y a menudo también la más difícil. Afortunadamente, tumbarse boca arriba sobre la hierba en un día cálido se presta muy bien al relax y a la claridad mental.

Vamos a ver la técnica.

Para comenzar, deberemos elegir un día agradable con temperaturas cálidas, asegurándonos que el sol no esté demasiado alto ni sea demasiado fuerte. Se debe poder mirar hacia las nubes sin ningún esfuerzo, sobre todo sin entrecerrar los ojos al dirigirlos hacia el cielo.

Podemos acompañarnos de alguna música relajante, llevándola en nuestro teléfono, si estamos acostumbrados a utilizarla. Personalmente, cuando me hallo en la naturaleza no me hace falta ninguna música; el canto de los pájaros, el zumbido de los insectos y el viento suelen ser más que suficientes. Pero esto va a gustos, así que cada uno elegirá su mejor opción.

Deberemos tener paciencia al comenzar a practicar el Scrying de Nubes. Es importante no saltar de inmediato a descifrar formas o incluso palabras en las formas de las nubes. Primero debemos relajarnos tranquilamente y permitir que las nubes floten sobre nosotros durante unos minutos, en los que únicamente las miraremos sin pensar en nada.

Incluso si no podemos descifrar ninguna forma, letra o palabra en las nubes el día que comencemos o incluso en los siguientes días, no deberemos preocuparnos en absoluto, eso será totalmente normal y suele ser debido al nerviosismo y a la impaciencia del momento.

Primero uno debe acostumbrarse a disfrutar de los paseos por la naturaleza. Con la práctica regular de la técnica, todo se vuelve mucho más sencillo. Práctica, paciencia y perseverancia son las claves para avanzar en cualquier técnica adivinatoria. 

Al cabo de unas semanas de práctica, deberíamos poder descifrar algún símbolo o letra que dé respuesta a nuestra pregunta. Una vez dominada la técnica, es muy interesante llevar un diario de Scrying o Libro de Sombras, en el que por ejemplo podemos incluir una fotografía de las nubes y la descripción que de ellas hemos hecho. Esto nos facilitará poder releer nuestra interpretación en el futuro y observar también nuestro progreso. Además, tendremos la posibilidad de poder volver a ellas y ver si en otro momento nos inspiran alguna cosa más.

Esta es una fotografia que tomé yo misma en el verano de 2018, cuando una nube me inspiró la visión de un precioso ángel. Si os fijáis en la hora, veréis que el sol comenzaba a ponerse, sin duda una hora muy cómoda para mirar al cielo.