La umbromancia es la adivinación por las sombras. Esta es una técnica de las más antiguas que existen, pero no por ello menos eficaz.
Esta técnica puede
llevarse a cabo de varias maneras, pero quizás la más tranquila y relajada, a
la vez que bella, sea caminando por el bosque en un día soleado. Lo más
complicado de esta técnica es enfocarse únicamente en las sombras y no en el
resto del paisaje. Como todo, es cuestión de práctica.
En la umbromancia
se buscan formas en las sombras, y estas formas incluyen animales, plantas,
objetos inanimados, o cualquier cosa que podáis imaginar. Por ello, podemos
llevarlo a cabo casi en cualquier lugar, siempre que en él se formen sombras de
algún tipo, ya sean sombras de arboles, plantas, de piedritas de arena de
playa, de animales en el campo, de los edificios de una ciudad, de las
briznas del césped de la casa del vecino, etc... Ya veis que las posibilidades
son casi infinitas. A vuestra imaginación lo dejo. También, si por ejemplo
estáis acostumbrados a trabajar con las runas o el tarot o algún otro oráculo,
podéis aprovecharlo y utilizar las formas y dibujos que conozcáis, así como su
interpretación.
En esta ocasión, y como me gustan las runas,
enlazaré las formas que vea con ellas y sus significados, aunque podéis
utilizar cualquier interpretación que queráis o que más os guste. Por ejemplo,
podéis usar los símbolos y significados utilizados para interpretar las hojas
de té o la borra del café o cualquier otra interpretación provenga de donde
provenga. La cuestión es que tengamos claro lo que vamos a usar. Veamos
ahora un pequeño ejemplo para que quede más claro.
Por
ejemplo, una persona nos plantea una pregunta sobre el ámbito laboral. Le han
ofrecido dos puestos de trabajo y debe decidirse por uno pero no sabe cuál de
ellos aceptar. Ambos son buenos trabajos con suculentos beneficios pero, ¿cuál
es mejor?
Para
iniciar el trabajo de interpretación y adivinación por las sombras, en este
caso imaginario caminaremos por un bosque, despejando nuestra mente a medida
que paseamos tranquilamente. El primer paso será pensar solo en ese primer
trabajo. Al cabo de unos minutos, apenas 4 o 5, nos detenemos y observamos las
sombras a nuestro alrededor. Vemos, por ejemplo, una forma de conejo, la runa
Fehu y un reloj. El conejo, que podría ser perfectamente una
hembra, representa la fertilidad. Los conejos cada vez que se aparean
suelen quedar embarazados. Pero la fertilidad no se limita solamente a la
reproducción. También puede referirse a una mente fértil, una empresa en
crecimiento o una carrera profesional fértil. Además, el conejo también es un
animal veloz. Tiene que serlo para escapar de los depredadores. La runa Fehu
tiene que ver con la riqueza material y el dinero o los beneficios. El dinero
es importante en nuestra vida. Y el reloj podría significar plazos, límites de
tiempo para entregar un trabajo, para terminar un producto, etc... Podría
significar también que el jefe vigila continuamente a sus empleados para asegurarse
de que no pierden el tiempo y trabajan duro. Quizás podría significar un
trabajo aburrido en el que uno se sienta a mirar el reloj mientras espera a que
termine el día.
A
continuación, caminamos unos pasos más y cerramos los ojos de nuevo, despejamos
la mente y pensamos únicamente en el segundo trabajo. A los 4 o 5 minutos
abrimos los ojos y observamos de nuevo las sombras. En esta ocasión, por
ejemplo, vemos una forma de tortuga, la runa Ehwaz y un pájaro con largas
plumas extendidas al viento. La tortuga es un animal de movimiento lento.
Llevan su hogar y su protección a donde quiera que van. Según la leyenda de los
nativos americanos, la Tierra es también una tortuga. La runa Ehwaz representa
la fertilidad, cooperación, habilidades creativas y un sentido de propósito. Y
el pájaro que vuela con sus largas plumas extendidas al viento es un pájaro que
aprovecha y disfruta de los cambios de temperatura del aire, y simplemente
flota en el viento sin ningún esfuerzo. Creo que ya todos tenemos claro cuál de
los dos trabajos escogeríamos. Pero prosigamos.
A continuación, lo único que nos queda por hacer es aconsejar a la persona que nos espera. Abandonamos el bosque y ofrecemos el consejo sobre los dos trabajos. Una de las mejores maneras de abordar esto es explicar los signos que hemos percibido y sus significados, para que la persona pueda decidir por sí misma.
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