La Ictiomancia es un tipo de adivinación que implica el uso de peces. Hay varias cosas a considerar para practicar este tipo de mancia.
En primer lugar, se buscan patrones en las
escamas situadas en los costados de los peces y también los patrones que se
forman mediante sus movimientos natatorios. En segundo lugar, se buscan
patrones en su comportamiento. El lugar más sencillo para poner esta técnica en
práctica es frente a un acuario o junto a un estanque donde podamos observar a
los peces con la claridad suficiente.
Como en
todas las mancias de este tipo, utilizaremos el método de interpretación que más
nos agrade. Si por ejemplo estáis acostumbrados a trabajar con las runas o el
tarot o algún otro oráculo, podéis aprovecharlo y utilizar las formas y dibujos
que conozcáis, así como su interpretación.
En esta ocasión, y como las runas son de fácil interpretación y muchos las conoceis,
enlazaré las formas que vea con ellas y sus significados, aunque podéis
utilizar cualquier interpretación que queráis o que más os guste. Por ejemplo,
podéis usar los símbolos y significados utilizados para interpretar las hojas
de té o la borra del café o cualquier otra interpretación provenga de donde
provenga. La cuestión es que tengamos claro lo que vamos a usar. Veamos
ahora un pequeño ejemplo para tenerlo más claro.
Comenzamos relajando la mente, al igual que
hacemos antes de iniciar cualquier práctica relacionada con una mancia.
A continuación, pensamos únicamente en la
pregunta o situación o preocupación que nos inquieta y observamos los peces. Imaginemos
que tenemos una pregunta sobre nuestro perro enfermo. ¿Debe operarse el perro? Observando
los peces, vemos que permanecen bastante quietos o nadan muy lentamente y no
les interesa la comida que está en la superficie del agua. Uno sale a la
superficie y se vuelve hacia nosotros. En uno de sus laterales podemos observar
una forma parecida a la runa Kenaz. Casi al momento, los peces se asientan en
el fondo y nuevamente muestran poca actividad. Entonces pensamos en nuestro perro
enfermo. Tampoco se ha estado moviendo mucho y tampoco le interesa demasiado la
comida desde hace unos días.
La runa Kenaz, suele enviarse a través del velo
cuando se está preparado para viajar a través de él. En esta lectura podríamos interpretar
que nuestro perro está listo para la transición. Puede que nosotros no lo
estemos, pero esa es otra cuestión. Dejar ir a un querido amigo peludo es lo
más humano que se puede hacer.
Ahora, hagámonos otra pregunta relacionada. ¿Debe
nuestro perro enfermo someterse a una cirugía? Como antes, observamos los
peces. Se muestran perezosos, apáticos, pero ahora, cuando alguien les arroja
comida al agua, luchan por llegar a ella. A la vez, vemos en el costado de uno
de los peces la runa Uruz. En otro pez, vemos la runa Jera. Pensamos en nuestro
perro. Un perro enfermo no es muy activo. El pez luchó, así que nuestro perro
quiere luchar contra esta enfermedad. La runa Uruz se ocupa de los asuntos de
salud. Y la runa Jera indica un punto de inflexión. En este caso, la cirugía es
la mejor opción para nuestro querido compañero peludo.
Como todas las mancias, también ésta requiere tiempo y práctica. Así que sé paciente y toma nota de todas tus interpretaciones. La práctica hace al maestro, recuérdalo.
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