Este
es un tipo de limpieza energética poco común, aunque muy efectiva. Suele realizarse
antes de tomar un baño de florecimiento o realizar una limpieza energética con
sal gruesa.
Para
llevarla a cabo necesitaremos una vela negra sin prender, que pasaremos por
todo nuestro cuerpo. Una vez efectuado este primer paso, encendemos la vela y
la colocamos en un candelabro o con unas gotas de cera la pegamos a un platito.
Una vez prendida debe dejar consumirse por completo.
Una
vez consumida, y esto puede llevar varias horas, recogemos los restos de la
vela, que pondremos dentro de una bolsa negra, y la tiramos a un cubo de basura
lo más alejado de nuestra vivienda.
Una
vez terminado el proceso, es recomendable realizar un baño de florecimiento o limpieza energética. Este es solo un ejemplo, en este blog tienes algunos más.
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